El Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania ha reportado este jueves un ataque aéreo de las fuerzas rusas en la ciudad de Dnipró que dejó tres muertos, incluido un menor, y alrededor de treinta heridos. El ataque, calificado como «masivo», afectó a varias infraestructuras, incluyendo viviendas, dormitorios de estudiantes y edificios comerciales, provocando numerosos incendios en la zona. En un mensaje a la nación, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski lamentó las pérdidas y reiteró la necesidad de intensificar la presión internacional sobre Rusia para poner fin a los cruentos ataques.
El gobernador de la región de Dnipropetrovsk, Serhi Lisak, informó que al menos la mitad de los heridos requieren atención médica y destacó que, a pesar de los ataques, los sistemas de defensa aérea lograron interceptar varios drones enemigos. Tragédias similares ocurrieron en otras localidades como Nikopol, donde un segundo ataque resultó en la muerte de dos personas más. Además, se reportaron ataques en Odesa, Sumi, Járkov y Donetsk, donde las autoridades confirmaron la muerte de dos ciudadanos en Kramatorsk. La escalada de violencia continúa siendo una grave preocupación para la población y el Gobierno ucraniano.
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