Felipe VI encabezará la delegación española en el funeral del Papa, que está programado para el sábado 26 de abril. Este emotivo evento marcará el último adiós al Sumo Pontífice, quien dejó un significativo legado en la Iglesia Católica y en la sociedad internacional. La participación del Rey subraya la importancia de este acontecimiento no solo para la religión, sino también para las relaciones diplomáticas entre España y el Vaticano.
La ceremonia se espera que congregue a líderes de todo el mundo, quienes se unirán para rendir homenaje a la figura del Papa y su influencia global. Felipe VI, como jefe del Estado, representará a España en un momento de solemnidad y reflexión, reflejando el respeto del país hacia una figura que ha sido un pilar para millones de creyentes. Este gesto también reafirma el compromiso de España con los valores del diálogo interreligioso y la cooperación internacional.
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