El Partido Socialista de Castilla-La Mancha ha defendido su compromiso con la gestión del agua frente a las críticas de la Comunidad Valenciana, que acusó a la región de insolidaridad. Durante una rueda de prensa, el diputado del PSOE, Antonio Sánchez, subrayó que Castilla-La Mancha ha estado solidariamente involucrada en el trasvase Tajo-Segura durante 46 años, un proceso que, según él, ha perjudicado a la comunidad a la vez que beneficiaba a otras. Sánchez enfatizó que, aunque la región seguirá siendo solidaria cuando sea necesaria el agua para el consumo humano, el impacto negativo del trasvase ha dejado al río Tajo en una situación crítica.
Sánchez también cuestionó si las reivindicaciones de Murcia y Valencia implican la desobediencia a las normas y sentencias judiciales que respaldan la postura de Castilla-La Mancha. Además, expresó su preocupación sobre la posición del líder del PP en la región, Paco Núñez, preguntándose si defenderá los intereses de Castilla-La Mancha o si se alineará con intereses foráneos. El diputado socialista instó a Núñez a unificarse en la defensa regional y a abogar por un solo discurso en materia hídrica, exhortándolo a mostrar un compromiso genuino con la comunidad.
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