La tercera de feria en Madrid dejó una impronta sobre las exigencias del público taurino, evidenciada en la corrida de Fuente Ymbro. La jornada, marcada por el frío y el viento, tuvo como protagonistas a toreros como Miguel Ángel Perera, Paco Ureña y Ginés Marín, quienes se enfrentaron a una variada presentación de toros. Mientras el primero y el quinto fueron devueltos por problemas de salud, el cuarto, apodado «Amargado», destacó por su bravura y nobleza, aunque ni Perera ni Ureña lograron salir aclamados debido a fallos con la espada, a pesar de sus valientes actuaciones. Ginés Marín, por su parte, brilló al final, obteniendo una ovación con una estocada impecable que le permitió dar una vuelta al ruedo.
La atmósfera en Las Ventas se contrastó con la paralización del tráfico en la ciudad debido a un esperado partido de fútbol entre el Barcelona y el Madrid. Este paralelismo entre los dos espectáculos reveló la fuerte conexión cultural en España, donde toros y fútbol atraen pasiones intensas. A medida que las luces de la plaza se apagaban, el fervor del público se mantenía. En medio de la contienda, un vendedor con gracia de aficionado al Atlético bromeó sobre el juego de fútbol, reflejando cómo ambos mundos, aunque distintos en riesgos y emociones, se entrelazan en la vida cotidiana de los españoles.
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