La lucha contra el cáncer ha tomado un nuevo impulso en Albacete, donde investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha están explorando las propiedades del guayule, una planta originaria del desierto entre México y Estados Unidos. El rector de la universidad, Julián Garde, junto a la presidenta de la asociación “Yo Soy Más Fuerte”, Lucía Rodríguez, firmaron un convenio de colaboración para investigar la bioactividad de compuestos extraídos del guayule en modelos de Sarcoma de Ewing. Este proyecto se enfoca en compuestos conocidos como argentatinas, que han mostrado potencial citotóxico en estudios previos y podrían ofrecer nuevas opciones terapéuticas.

Además de sus aplicaciones biomédicas, el guayule es considerado un cultivo sostenible y de alto valor en Castilla-La Mancha. En el contexto de EXPOVICAMAN, expertos destacaron sus beneficios agronómicos, incluyendo resistencia a la sequía y bajo consumo de recursos. Investigadores y agricultores se unieron para promover este cultivo, que no solo contribuye a la salud pública, sino también ofrece oportunidades económicas para la región. La colaboración entre la academia y la asociación busca avanzar en tratamientos innovadores, generando esperanza para pacientes y fortaleciendo la comunidad frente al cáncer.

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