El murciano Carlos Alcaraz, una de las grandes estrellas del tenis mundial, ya calienta motores para defender su título en Wimbledon, el tercer Grand Slam del año. Tras conquistar la hierba londinense en 2023 y repetir la gesta en 2024, el joven español busca revalidar la corona con la confianza y el talento que lo han convertido en uno de los favoritos del circuito.
Su debut será ante el veterano italiano Fabio Fognini, un rival al que ya ha vencido en anteriores ocasiones y con el que mantiene un historial positivo. En principio, el sorteo le ha deparado un cuadro competitivo pero relativamente amable en las primeras rondas, sin grandes amenazas hasta bien avanzada la competición. Si todo sigue su curso, podría cruzarse en octavos con figuras como el ruso Andrey Rublev o el griego Stefanos Tsitsipas. Y en semifinales, el reto podría subir de nivel con potenciales duelos frente a jugadores de peso como Alexander Zverev o Taylor Fritz.
Badosa, con ambición renovada
En el cuadro femenino, la española Paula Badosa llega como décima cabeza de serie y con ganas de firmar un buen papel sobre el césped británico. En su primer partido se medirá a la británica Katie Boulter, a la que ya superó en Roland Garros, un precedente que invita al optimismo. Si avanza, podría encontrarse en una hipotética cuarta ronda con la potente estadounidense Madison Keys, en lo que sería un duelo de alto voltaje.
Junto a Badosa, también estarán en acción otras representantes del tenis español: Jessica Bouzas se enfrentará a la alemana Ella Seidel, mientras que Cristina Bucsa debutará contra la rumana Anca Todoni.
Las favoritas, en el punto de mira
En la parte alta del cuadro femenino, la número uno del mundo, Aryna Sabalenka, comenzará su andadura frente a la canadiense Carson Branstine, mientras que la vigente campeona del torneo, la checa Barbora Krejcikova, se estrenará contra la joven promesa filipina Alexandra Eala.
Con grandes nombres en liza y muchas historias por escribirse, Wimbledon 2025 promete emoción, espectáculo y la oportunidad de ver a Carlos Alcaraz luchar por seguir haciendo historia.