El debate sobre la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha ha generado fricciones notables en la política regional, con el PSOE y el PP posicionándose enérgicamente contra Vox por su oposición a este proceso legislativo. En una serie de ruedas de prensa llevadas a cabo el viernes, la portavoz socialista Ana Isabel Abengózar criticó duramente a Vox por su rechazo al sistema autonómico, argumentando que resulta incoherente ocupar escaños en las Cortes Regionales mientras se desacredita a las autonomías. Abengózar calificó esta postura de «vergonzosa» y «pura hipocresía», instando a los representantes de Vox a abandonar sus puestos si no comparten el respeto por las instituciones autonómicas que representan.

Por otro lado, Santiago Lucas-Torres, del PP, también expresó su descontento por la postura de Vox, calificando de «pena» y «terrorífico» que el partido considere la reforma del estatuto una estafa. Lucas-Torres cuestionó el papel de Vox en las Cortes, sugiriendo que su presencia se reduce a obtener beneficios económicos sin contribuir al desarrollo regional. Además, Abengózar hizo un llamado a los populares para que reevalúen su relación con Vox, sugiriendo que mantener una alianza con ellos implica consentir una actitud que ataca la democracia autonómica. La reforma del estatuto, para Abengózar, es esencial para reflejar la realidad actual de Castilla-La Mancha, actualizando una normativa que tiene más de cuatro décadas y que, según ella, ya no se ajusta a la identidad regional moderna.

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