El viceconsejero de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, José Almodóvar, ha emitido una seria advertencia respecto a los incendios provocados por el uso de cosechadoras en la región. Aunque estos representan solo el 5 por ciento de los incendios, son responsables de quemar un 25 por ciento de la superficie dañada cada año. Almodóvar subrayó que, en promedio, alrededor de 1.800 hectáreas se consumen en cada incidente relacionado con esta maquinaria, y llamó a los agricultores a extremar la precaución durante los períodos de alto riesgo.

Además, el viceconsejero destacó el contexto complicado que enfrentan los servicios de extinción, mencionando la existencia de «incendios extremos» que se vuelven incontrolables bajo ciertas condiciones climáticas. Estas circunstancias se han visto agravadas por el éxodo rural y el consiguiente aumento de áreas forestales debido al abandono agrícola. En este sentido, la normativa reciente ha permitido una mayor flexibilidad en el uso de tierras, aumentando la superficie agrícola libre de restricciones. Sin embargo, Almodóvar enfatizó que la mayoría de los fuegos en la comunidad son naturales, con rayos como causa predominante en zonas como Cuenca.

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