El FC Barcelona enfrentó un difícil desafío en Stamford Bridge, donde cayó derrotado por el Chelsea en la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions. La expulsión del capitán Ronald Araujo al borde del descanso dejó al equipo catalán en inferioridad numérica, complicando sus opciones de un resultado positivo. A pesar de un prometedor inicio, con Ferran Torres desaprovechando una clara oportunidad en el minuto cinco, la situación se deterioró rápidamente para los culés. La actuación del VAR evitó una derrota más contundente al anular tres goles del Chelsea, que se mostró superior tras el descanso.
La segunda parte fue dominada por los “blues”, con goles decisivos de Estevão y Liam Delap, que dejaron el marcador final en 3-0. La defensa del Barça, liderada por Pau Cubarsí y Joan Garcia, evitó que la diferencia fuera mayor, pero los errores individuales y la falta de contundencia marcaron la actuación. Lamine Yamal, uno de los rescatables en el campo, mostró su descontento al ser sustituido en el tramo final del partido. El resultado deja al Barcelona en una situación comprometida, obligándoles a ganar los próximos tres encuentros para aspirar a los octavos de final, mientras que el Chelsea se afirma como candidato al “Top 8”. La mala suerte sigue acompañando al Barça en Stamford Bridge, un campo que se ha convertido en un auténtico desafío para ellos.
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