Las altas temperaturas amenazan con intensificarse en Castilla-La Mancha, según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Se espera que las anomalías de calor se prolonguen hasta el 20 de julio, con temperaturas que podrían superar entre tres y seis grados los valores habituales para esta época del año. Ciudades como Toledo, Talavera y Ciudad Real se enfrentarán a valores de aviso naranja, con temperaturas elevadas durante varios días consecutivos.

El delegado de Aemet en la región, Luis María Bañón, presentó este pronóstico junto con el análisis de la primavera pasada, en un evento en el que también participó la delegada del Gobierno, Milagros Tolón. Las proyecciones para las dos semanas posteriores a julio indican que las temperaturas seguirán siendo superiores a lo normal, alcanzando un incremento de entre uno y tres grados adicionales. Este escenario sugiere un verano cálido en la región, lo que añade preocupaciones sobre el bienestar de la población y la gestión de recursos hídricos.

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