En un encuentro que prometía ser vibrante, el Calvo Sotelo y el Albacete B se encontraron en la Ciudad Deportiva Andrés Iniesta, pero el resultado final fue un empate sin goles que dejó a ambos equipos con un sabor agridulce. Este partido, correspondiente a la cuarta jornada de liga, se desarrolló en un ambiente de tensión y expectativa, con la afición local, algo más de un centenar de espectadores, que asistió para ver cómo sus jugadores se esforzaban por alcanzar la victoria.
El Calvo Sotelo, liderado por el entrenador Rafa Guerrero, llegaba al encuentro con el lastre de una semana intensa, marcada por el compromiso de la Copa Federación y el desgaste físico acumulado. A pesar de esto, el equipo no escatimó esfuerzos desde el pitido inicial, buscando asegurar puntos vitales en su lucha por mantenerse en los primeros lugares de la tabla. Sin embargo, la falta de acierto en la definición fue un obstáculo que no lograron superar, a pesar de generar varias situaciones de gol.
Consciente de la importancia de cada punto, el Calvo Sotelo se mostró entregado en su intención de lograr una victoria que los acercara a sus objetivos. La estrategia del equipo se centró en un juego serio y ofensivo, buscando constantemente el desmarque y la penetración en la defensa rival. A pesar de su insistencia, el marcador permaneció inalterado, reflejando la frustración de un equipo que dio todo en el terreno de juego sin poder concretar sus oportunidades.
La segunda mitad del encuentro evidenció la decisión del Calvo Sotelo por cambiar el rumbo del partido, implementando un juego más vertical y dinámico. Los jugadores, impulsados por la necesidad de un gol, comenzaron a crear situaciones peligrosas, utilizando las bandas y la creatividad de su línea de ataque como principales armas. Sin embargo, a pesar de sus múltiples intentos y del esfuerzo manifiesto, la fortuna no estuvo de su lado, sumando un empate que, aunque permite seguir sumando, no refleja la ambición del equipo.
Desde el vestuario, se reconoce que el camino por delante está lleno de retos, y que la constancia y la mejora continua serán claves para enfrentar el futuro. El trabajo arduo y la preparación son imperativos en las próximas semanas, donde el Calvo Sotelo buscará adaptarse y crecer ante las situaciones adversas que puedan presentarse.
El empate ante el Albacete B se convierte en un paso más en la travesía del Calvo Sotelo, que sabe que la liga es larga y que cada punto cuenta. El equipo y cuerpo técnico están determinados a seguir luchando y a no dejar escapar oportunidades que permitan alcanzar sus metas en esta temporada.