El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha convocado a agentes sociales, empresas y sectores afectados por los aranceles impuestos por Estados Unidos en una reunión celebrada en el Palacio de Fuensalida. Este encuentro busca abordar la complicada situación que enfrentan las empresas de la región que tradicionalmente exportaban a Norteamérica. Durante la reunión, se discutieron diversas propuestas, entre las que destaca el «destope» del presupuesto del Instituto de Promoción Exterior, que permitirá un mayor apoyo a las empresas en su esfuerzo por explorar nuevos mercados ante la amenaza de una caída en las ventas hacia EE. UU.
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, enfatizó la importancia de un enfoque personalizado para ayudar a las 292 empresas que exportan regularmente desde la región, así como a las más de 800 que lo hacen de manera menos frecuente. Entre las iniciativas discutidas también se consideró la creación de un observatorio para el seguimiento de esta problemática y la necesidad de fomentar un trabajo conjunto que permita adaptarse a los cambios en el panorama internacional. El presidente de la patronal Cecam, Ángel Nicolás, subrayó que las medidas implementadas son un esfuerzo a largo plazo, orientadas a mitigar las pérdidas en el mercado estadounidense y fortalecer las posiciones comerciales de Castilla-La Mancha en otras regiones.
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