El Gobierno de Castilla-La Mancha ha comenzado un ambicioso programa de entrega de material de emergencias a 39 entidades locales en la región, una acción que refuerza las capacidades de las agrupaciones de Protección Civil. Esta iniciativa, que incluye desfibriladores, camillas y botiquines, representa una inversión de casi 450.000 euros y está cofinanciada en un 85% por la Unión Europea. La medida busca proporcionar a los voluntarios de Protección Civil los recursos necesarios para actuar con eficacia ante emergencias, fomentando así la seguridad y el bienestar en las comunidades.
La distribución se lleva a cabo en colaboración con la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, y se enmarca dentro del Programa FEDER 2021-2027 de Castilla-La Mancha. Desde 2016, el Ejecutivo regional ha destinado más de 3,6 millones de euros a equipar a 252 agrupaciones de la región, que cuentan con alrededor de 4.254 voluntarios. Con este esfuerzo, se busca fortalecer la respuesta ante incidentes y emergencias, resaltando el papel crucial que desempeñan estas agrupaciones en la gestión de crisis en los municipios.
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