La Audiencia Provincial ha llevado a juicio a cinco individuos acusados de tráfico de drogas en un inmueble del barrio de Las 60 viviendas. La Fiscalía ha solicitado penas de cuatro años y medio de prisión y multas que suman unos 250.000 euros para cuatro de los procesados, mientras que un quinto enfrenta dos años de cárcel y una multa de 200 euros, dado que solo se le encontró hachís, una droga de menor riesgo para la salud. Durante la última sesión del juicio, se discutió el papel de una de las acusadas, N.M.G., cuya pena podría reducirse dependiendo del papel que el Tribunal considere que jugó en la organización.
Las defensas han insistido en la absolución de sus clientes, quienes, según la Policía Nacional, pertenecen a un clan familiar. El abogado Marcos García-Montes fue el más contundente, cuestionando la validez de los registros que llevaron a la incautación de las drogas, indicando que se realizaron en áreas no autorizadas por el juez. Además, argumentó que su cliente, J.B.A., presenta evidencia de drogodependencia y solicitó su puesta en libertad, enfatizando que su ingreso en un programa de rehabilitación confirmaba su situación.
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