Los habitantes de Talavera de la Reina, en Toledo, se encuentran consternados tras el derrumbe del histórico puente viejo, conocido como el puente romano, a causa de las intensas crecidas del río Tajo. Este emblemático monumento, que ha sido un símbolo de la ciudad durante siglos, colapsó en dos secciones en la madrugada de este domingo, provocando una ola de tristeza entre los vecinos, que se congregaron en el lugar para verificar la veracidad de las noticias que comenzaron a circular en la mañana. «Es una desgracia para la ciudad», expresaron algunos ciudadanos que revivieron recuerdos de su infancia vinculados a este puente, donde solían jugar o pasear.
El puente, cuyo origen se remonta a la época romana y fue rehabilitado por última vez en 2002, representa un importante legado cultural y arquitectónico para Talavera. Ante este suceso, el alcalde de la localidad confirmó que el caudal del río podría haber superado los 1.000 metros cúbicos por segundo, lo que califica como una «avenida histórica» para la región. A medida que los talaveranos enfrentan la pérdida de este patrimonio, se resalta el impacto emocional que el colapso ha generado en la comunidad, reflejando el dolor por el patrimonio perdido y la nostalgia por los momentos vividos en este emblemático lugar.
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