La última jornada de la Tercera División ha dejado un sabor agridulce para los equipos de Albacete. El Huracán de Balazote tuvo un desafortunado viaje a Tarancón, cayendo 3-1 tras un inicio adverso con dos goles en contra en apenas 26 minutos. Adrián Picazo logró recortar distancias antes del descanso, pero un tercer gol de Madalin consolidó la victoria local y envió al Huracán a la decimotercera posición con 16 puntos. Mientras tanto, el CP Villarrobledo consiguió un valioso empate sin goles frente al Illescas, resistiendo los embates locales con una sólida defensa. Aunque tuvieron oportunidades, las intervenciones del portero Luis Carreras impidieron la victoria, dejando al Villarrobledo en el decimoquinto lugar, a cuatro puntos del descenso.
Por su parte, el Atlético Albacete protagonizó un accidentado empate 1-1 en Villacañas. El encuentro estuvo marcado por las expulsiones y numerosas tarjetas amarillas. Aún con dos jugadores menos, el equipo local consiguió igualar el marcador en el minuto 93 gracias a un cabezazo de Juancho, después de que Parrado adelantase al filial al que dirige Ricardo Fajardo. Este resultado desplaza al Atlético Albacete a la quinta posición, alejándolos a cinco puntos del líder, Toledo. Tras el partido, Fajardo expresó su descontento por el comportamiento tanto del público como de los jugadores locales, añadiendo tensión a un cierre de año ya complicado para los equipos de la provincia.
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