Desde París, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, ha lanzado una advertencia clara sobre el futuro de las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania, condicionando el apoyo de la Administración Trump a la demostración de compromiso por parte de ambos países. En el marco de reuniones con representantes europeos y delegados de Ucrania, Rubio subrayó la necesidad urgente de que las partes involucradas establezcan si un acuerdo de paz es factible a corto plazo. «Si no lo es, entonces seguiremos adelante con otra cosa», afirmó, enfatizando que el tiempo para llegar a un consenso no se extenderá por «semanas o meses».
Por su parte, el Kremlin ha respondido a las declaraciones de Rubio afirmando que existen «avances concretos» en las negociaciones con Estados Unidos. Dmitri Peskov, portavoz del presidente ruso, destacó que el progreso se relaciona con una moratoria provisional sobre ataques a la infraestructura energética ucraniana, algo que Rusia ha respetado. Sin embargo, mientras los intercambios de ataques continúan entre ambos países, la situación en el terreno sugiere que el camino hacia un acuerdo de paz sigue siendo incierto.
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