En un momento clave de las tensiones internacionales, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, anunció un inminente endurecimiento de las sanciones contra Rusia. Este anuncio se da en el contexto de un estancamiento en las negociaciones para resolver la invasión rusa de Ucrania. Desde la Casa Blanca, Bessent adelantó que se espera que el anuncio oficial de las nuevas medidas sea después del cierre de los mercados, anticipando que se tratará de uno de los paquetes de sanciones más severos hasta la fecha. Sin revelar detalles específicos, dejó en claro el descontento de la administración de Donald Trump sobre la falta de avances en las conversaciones con Rusia, citando la decepción del presidente al respecto.

La Administración Trump también se ha distanciado de los rumores sobre la supuesta aprobación para que Ucrania utilice misiles de largo alcance en territorio ruso. A través de Truth Social, Trump negó cualquier implicación estadounidense en tales acciones, subrayando que Estados Unidos no tiene control sobre los misiles ni sobre su uso por parte de Ucrania. Este clima de tensiones internacionales se agrava tras la cancelación de un futuro encuentro potencial entre Trump y Vladimir Putin, que estaba previsto en Budapest, haciendo visible un deterioro significativo en las relaciones bilaterales.

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