El Ayuntamiento de Albacete ha generado controversia al declarar al presidente Pedro Sánchez como persona non grata, exigiendo su dimisión en una moción respaldada por Vox y el Partido Popular. La iniciativa, impulsada por el concejal no adscrito José Ramón Conesa, se aprobó con 16 votos a favor y 9 en contra, provocando críticas de la oposición que la calificó como un atentado contra la democracia. El concejal insistió en que el gobierno de Sánchez es el más corrupto de la historia, señalando los vínculos con formaciones políticas que él considera perjudiciales para el país.
Esta decisión ha desencadenado un intenso debate político en el pleno municipal. Mientras Vox y el PP defienden la moción como un reflejo de la crisis institucional, el PSOE y Unidas Podemos la rechazan, argumentando que esta estrategia solo busca alimentar el odio y la polarización política. A pesar de su impacto simbólico, la declaración de una persona non grata no conlleva sanciones legales, aunque resuena como un fuerte mensaje en un clima político tenso, donde el respeto a la figura del presidente es motivo de discusión.
Leer noticia completa en Albacete abierto.
