El Ayuntamiento de Ciudad Real ha dado un importante paso al completar la demolición de una casa ubicada en el Parque de Gasset, un proceso que ha estado marcado por conflictos durante casi tres décadas. Esta acción, según el alcalde Francisco Cañizares, representa una mejora significativa en la seguridad y en la convivencia en el área, eliminando un punto problemático que estaba afectando a uno de los espacios públicos más queridos por los ciudadanos. La casa, que no pertenecía al municipio, se había convertido en un foco de ocupación y preocupación para los vecinos.
Con la demolición, el Ayuntamiento está a un paso de finalizar la compra del terreno, lo que permitirá la ampliación del parque. Cañizares subrayó que se ha puesto fin a un problema que había permanecido enquistado desde 1996, logrando así mitigar los efectos negativos que la ocupación tenía en el entorno y asegurando un ambiente más tranquilo para los usuarios. Además, el alcalde agradeció el esfuerzo de la Dirección General de Urbanismo y el trabajo conjunto con los propietarios, enfatizando la importancia de este acuerdo para el bienestar de la comunidad.
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