La consejera de Educación de Villarrobledo, Cristina García, informó sobre los resultados de una reciente reunión enfocada en el absentismo escolar en la localidad, que actualmente afecta a 104 estudiantes, aunque solo 11 de esos casos son considerados graves y cuentan con un protocolo abierto. Durante el encuentro, se destacó la importancia de abordar el problema desde múltiples frentes, incluyendo la implementación del programa ‘Pásate’, que tiene como objetivo apoyar a los alumnos expulsados de los centros educativos, así como la promoción de la convivencia en las aulas, una de las causas identificadas del absentismo.
Como parte de las estrategias para combatir esta problemática, se mencionó el trabajo del programa Agente Tutor, que incorpora a un policía especializado en la mediación y resolución de conflictos, con el fin de prevenir la violencia escolar y el vandalismo. Además, los participantes en la reunión acordaron la creación de una mesa técnica que se encargará de actualizar el protocolo de absentismo, buscando una mayor eficiencia en la coordinación entre los centros educativos y los Servicios Sociales del Ayuntamiento. Esta iniciativa pretende reforzar la colaboración para abordar de manera efectiva el absentismo y fomentar un ambiente escolar más inclusivo y seguro.
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