El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar el ascenso del coronel jefe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil a general. Esta decisión ha generado polémica debido a las acusaciones de que el Gobierno busca «descabezar» a la UCO, unidad encargada de investigar casos de corrupción. Sin embargo, el Ministerio del Interior ha insistido en que el coronel Rafael Yuste, actual jefe de la UCO, siguió voluntariamente el proceso de capacitación para el ascenso y tiene derecho a promocionar si cumple con los requisitos, refutando cualquier teoría conspirativa al respecto.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido en el Congreso que la gestión de la UCO bajo su liderazgo ha sido reforzada, casi duplicando su plantilla y presupuesto. Ha asegurado que esto ha fortalecido la independencia y eficacia de la unidad. Destacó que la UCO actúa como policía judicial bajo las directrices de jueces y fiscales, sin interferencias del Ejecutivo. El Gobierno ha reafirmado su compromiso con mantener la integridad de las investigaciones y desmintió intervenir en casos de alto perfil político, subrayando el significativo incremento de efectivos y recursos desde 2018.
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