El Índice de Precios de Consumo (IPC) experimentó un ligero aumento del 0,1% en marzo en comparación con el mes anterior, al tiempo que su tasa interanual se redujo en siete décimas, situándose en el 2,3%, un nivel que no se veía desde octubre pasado. Este descenso cierra una racha de cinco meses consecutivos de incrementos en la inflación. El Instituto Nacional de Estadística (INE) atribuye esta disminución al abaratamiento de la electricidad, impulsado por las intensas lluvias de marzo, así como a la caída en los precios de carburantes y una moderación en los aumentos de precios en el sector de ocio y cultura.
A pesar del aumento mensual del IPC, que se debe principalmente al crecimiento de precios en hoteles y restaurantes y a la llegada de la temporada de primavera-verano, el grupo de transporte vio una disminución del 0,7% en marzo por la caída de los precios de carburantes. Además, el IPC armonizado también se redujo, alcanzando una tasa interanual del 2,2%. El Ministerio de Economía destacó que, a pesar de la incertidumbre internacional, España sigue siendo la economía de más rápido crecimiento en la zona euro, con un crecimiento compatible con la moderación de los precios y la mejora en el poder adquisitivo de los ciudadanos.
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