El Observatorio Regional de Impacto de los Aranceles ha celebrado su sesión constitutiva, presidida por los consejeros de Economía y Agricultura, Patricia Franco y Julián Martínez, respectivamente. En este encuentro, se decidió crear tres grupos de trabajo sectoriales que se encargarán de monitorizar el impacto de la política arancelaria estadounidense sobre el comercio exterior de Castilla-La Mancha, enfocándose en productos agroalimentarios, bienes de consumo y bienes industriales. Franco destacó que, aunque los primeros datos del año muestran un crecimiento del 11% en las exportaciones de la región, se ha registrado un descenso del 21% en las ventas a Estados Unidos, alertando sobre la necesidad de una vigilancia continua en este ámbito.
El consejero Martínez enfatizó la importancia de apoyar al sector agroalimentario frente a las guerras comerciales, instando a dejar los alimentos al margen de estas disputas. A pesar de que las exportaciones agroalimentarias hacia EE.UU. representan una cifra modesta en el contexto global, los sectores del queso, aceite y vino son los más afectados por los aranceles. Martínez concluyó que es fundamental mantener una respuesta coordinada entre el Ejecutivo regional y la Unión Europea, confiando en que el período de negociación actual permita mitigar las repercusiones en el comercio y fortalecer las relaciones comerciales futuras.
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