La portavoz del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Alejandra Hernández, ha denunciado lo que califica como un nuevo veto del presidente Emiliano García-Page al PP, al impedir la tramitación en las Cortes de la supresión de un nuevo impuesto sobre el agua. Durante una rueda de prensa en la sede del PP, Hernández afirmó que la postura del PSOE es clara: han implementado un gravamen que obligará a los alcaldes a recaudar cerca de 100 millones de euros, incrementando así la presión fiscal sobre los ciudadanos de la región. Criticó también la pasividad de los alcaldes socialistas ante lo que considera una carga fiscal creciente impuesta por García-Page.
La portavoz del PP destacó que el próximo pleno en las Cortes será una oportunidad idónea para discutir la eliminación de este nuevo canon, que, según ella, representa una intromisión en las economías familiares. Además, mencionó que mientras García-Page presume de un superávit de 76 millones de euros, se está creando un impuesto que busca recaudar más de 100 millones. Hernández también apuntó a un aumento en la carga fiscal en Castilla-La Mancha en comparación con otras comunidades gobernadas por el PP, insinuando similitudes entre las políticas fiscales de García-Page y Sánchez. Por último, recordó una iniciativa del líder del PP regional, Paco Núñez, que fue rechazada por el PSOE y Vox, relacionada con la crítica al Pacto Verde y a la política arancelaria de Trump.
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