El Grupo Parlamentario Socialista ha presentado una propuesta para regularizar a los migrantes que hayan llegado a España antes del 31 de diciembre de 2024, a través de una «autorización de circunstancias excepcionales única». Este borrador, que se está negociando con otros grupos parlamentarios, busca modificar la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) destinada a regularizar a medio millón de personas extranjeras, la cual lleva estancada en el Congreso durante un año. Bajo esta nueva autorización, los migrantes podrán residir y trabajar en toda España, aunque deberán cumplir requisitos específicos que se dictarán por Real Decreto.

A pesar de estos avances, la propuesta también deja fuera a solicitantes de asilo, lo que ha provocado críticas de organizaciones que trabajan con migrantes. Estas entidades, así como el Defensor del Pueblo, han expresado su preocupación por el impacto negativo del nuevo Reglamento de Extranjería en quienes buscan protección internacional. Aunque todos los grupos de la Cámara Baja, excepto Vox, respaldaron la ILP el año pasado, las organizaciones han denunciado un estancamiento en su tramitación, lo que ha generado inquietudes sobre la voluntad política para avanzar en esta cuestión.

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