Las Cortes de Castilla-La Mancha han iniciado un procedimiento para modificar su reglamento, asegurando que las ayudas que proporciona el Parlamento a los grupos parlamentarios sean destinadas exclusivamente a actividades políticas dentro de la región. Este cambio fue motivado por un incidente reciente en el que Vox tuvo que devolver fondos transferidos a su organización nacional. La propuesta, impulsada por el Grupo Parlamentario Socialista, exige que los partidos justifiquen documentalmente el destino regional de los fondos. Además, se ha decidido llevar adelante esta modificación mediante un procedimiento de urgencia, con el fin de prevenir futuros desvíos de dinero.
Vox ha expresado su descontento con el proceso, criticando la ausencia de debate y enmiendas, señalando que el trámite se está llevando a cabo «oscura, caciquil y por la puerta de atrás». A pesar de estar de acuerdo con que los fondos no se utilicen fuera de Castilla-La Mancha, el partido ha señalado que el PSOE ha realizado transferencias significativas a su sede nacional, lo que califican de incoherente. Por su parte, fuentes del Parlamento han explicado que la urgencia del nuevo reglamento busca ofrecer una solución rápida y efectiva a la situación.
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