El Senado de Estados Unidos ha aprobado un paquete de medidas que pone fin al cierre gubernamental más largo en la historia del país, que duró 41 días. Ocho senadores demócratas votaron junto con la mayoría republicana, lo que ha generado críticas dentro de su partido, especialmente hacia el líder de la minoría demócrata, Chuck Schumer. La ruptura partidista ha sido calificada por el senador Bernie Sanders como una «muy mala» decisión que podría incrementar los costos de los seguros médicos para más de 20 millones de estadounidenses. La votación desbloquea la financiación de diversos sectores del gobierno hasta 2026 y logra la reincorporación de más de 4,000 empleados federales afectados por el cierre.
Sin embargo, esta decisión no ha abordado las demandas de los demócratas sobre la extensión de los subsidios para la atención médica, lo que ha perpetuado tensiones internas. El representante californiano Ro Khanna ha sido particularmente crítico, sugiriendo que Schumer debería ser reemplazado. A pesar de estas divisiones, el líder demócrata en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, ha defendido la eficacia de Schumer y su liderazgo. En el contexto del cierre, los efectos han sido significativos, incluyendo la expiración de fondos del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria y la cancelación de vuelos, lo que podría impactar negativamente en la economía del país. La propuesta aprobada ahora regresa a la Cámara de Representantes, que no ha votado desde el 19 de septiembre y se espera que lo haga pronto.
Leer noticia completa en La Tribuna de Albacete.