El Servicio de Apoyo y Asistencia Psicosocial a Víctimas de Familiares y Grupos Operativos en situación de Urgencia, Emergencia, Crisis y Catástrofes del Gobierno de Castilla-La Mancha ha atendido un total de 48 incidentes durante el año 2024, según la información proporcionada por la Junta en una nota de prensa. Este servicio es activado a través del Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 112, que depende de la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital.
En comparación con el año anterior, 2023, se ha registrado una disminución en el número de situaciones de emergencia atendidas, ya que en ese año se contabilizaron 51 intervenciones. Los equipos de psicólogos y trabajadores sociales que conforman el servicio tienen como objetivo proporcionar un primer apoyo psicosocial a las personas afectadas por accidentes o sucesos traumáticos. Entre las situaciones más preocupantes, los suicidios han sido responsables de la mayoría de las intervenciones, alcanzando un total de 21 casos durante el pasado año.
Además de los suicidios, se han atendido varios fallecimientos inesperados, especialmente de menores, y accidentes de tráfico, que han representado una porción significativa de las actuaciones de los equipos activos, superando los 12 casos. Un episodio notable fue la intervención en el colegio de Magán, a raíz de los incidentes provocados por una dana en septiembre del año anterior.
En cuanto a la temporalidad de las intervenciones, la mayoría de los casos en 2024 se dieron en los meses de abril y julio, con ocho y siete activaciones respectivamente, seguidas de diciembre, con seis incidentes. Si se distribuyen geográficamente las intervenciones, Toledo se destaca como la provincia con el mayor número de casos, con más de la mitad del total, al registrar 25 incidentes. Cuenca le sigue con diez intervenciones, y Ciudad Real con ocho. En contraste, Albacete y Guadalajara fueron las provincias que menos activaciones necesitó, con tres y dos incidentes respectivamente.
El aumento de incidentes en Toledo, que incrementó en tres en comparación con el año anterior, resalta la necesidad de este tipo de apoyo en la región. Cabe mencionar que un solo incidente gestionado por el Servicio de Emergencias 112 puede requerir múltiples intervenciones del Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Catástrofes (GIPEC), dado que es común que se necesite proporcionar apoyo durante varios días a las personas afectadas.
El principal objetivo del Servicio de Apoyo y Asistencia Psicosocial es brindar atención psicológica tanto a las víctimas de los incidentes como a sus familiares, ayudándoles a sobrellevar las pérdidas personales. Este servicio, desarrollado en colaboración con Cruz Roja de Castilla-La Mancha, se extiende también a los trabajadores del organismo interviniente, quienes pueden verse emocionalmente afectados por su participación en incidentes de consideración especial.
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