En su tradicional Mensaje de Navidad, el Rey Felipe VI ha hecho un llamado contundente al diálogo y al consenso en la clase política española, instando a que la contienda política no ahogue la «demanda de serenidad» de la sociedad. Desde el Palacio Real, el monarca ha destacado la importancia de mantener el bien común por encima de las divergencias, recordando que la concordia fue la base sobre la que se sustentó la Constitución de 1978. A lo largo de su discurso, Felipe VI enfatizó que la responsabilidad de reflejar esta noción del bien común recae en todas las instituciones, destacando la necesidad de un diálogo constructivo que permita abordar los desafíos actuales y fomentar la confianza en las instituciones.
El Rey también abordó temas de gran relevancia para los ciudadanos, como la inmigración y el acceso a la vivienda, reconociendo su complejidad y la necesidad de gestionar adecuadamente estos temas para asegurar la cohesión social. Resaltó la importancia de integrar a los inmigrantes y garantizar que se respeten las leyes fundamentales, al tiempo que se les reconoce su dignidad. También apuntó a la urgente necesidad de encontrar soluciones viables para el acceso a la vivienda, especialmente para los jóvenes más vulnerables. Felicitando la solidaridad mostrada en tiempos difíciles, Felipe VI instó a que esta actitud permanezca activa en el futuro, destacando el potencial de España como nación y la responsabilidad colectiva de construir un entorno más unido y solidario.
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