Un agente de la Guardia Civil de Albacete salvó la vida de un hombre de 45 años que sufrió un atragantamiento en un bar de Hellín mientras se encontraba fuera de servicio. El suceso tuvo lugar el pasado sábado, cuando el guardia civil, que se hallaba cenando con su esposa, notó que un comensal de una mesa cercana se levantaba en evidente dificultad para respirar. Al darse cuenta de la situación de emergencia, el agente se apresuró a ayudar al individuo afectado, aplicando la maniobra de Heimlich.
Gracias a su rápida intervención y formación en primeros auxilios, el guardia civil logró liberar las vías respiratorias del hombre tras varias compresiones torácicas. La víctima logró expulsar el alimento que le obstruía la garganta y recuperó la normalidad en su respiración. La Asociación Unificada de la Guardia Civil compartió un vídeo en redes sociales que documenta este heroico acto, resaltando la importancia de la preparación y la valentía de quienes eligen servir en las fuerzas de seguridad.
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