La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha está en la fase final de implementación de ayudas destinadas a mitigar los efectos de la sequía sobre la agricultura y la ganadería en el sureste de Albacete. El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, ha anunciado que 65 municipios severamente afectados recibirán apoyo financiero, en un esfuerzo por preservar y fortalecer el sector primario en una región que enfrenta serios desafíos climáticos.
Estas ayudas buscan aliviar las pérdidas sufridas por los agricultores y ganaderos durante un periodo marcado por la falta de precipitaciones. La iniciativa refleja el compromiso del gobierno regional por garantizar la sostenibilidad de la actividad agrícola y proteger los medios de vida de los productores locales, en un contexto donde las condiciones climáticas adversas continúan afectando la seguridad alimentaria y la economía regional.
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