El FC Barcelona sobrevivió a un trepidante empate 3-3 contra el Brujas en el Jan Breydelstadion, en un enfrentamiento donde Lamine Yamal brilló intensamente. A pesar de enfrentar problemas defensivos evidentes, el equipo de Hansi Flick logró rescatar un punto gracias a la actuación de Yamal, quien no solo marcó el segundo gol, sino que también fue el arquitecto del empate final. El joven talento del Barça enfrentó una noche complicada como el único faro de esperanza en una defensa que se mostró vulnerable ante las contras letales del equipo belga. A lo largo del partido, el Barça vio cómo dos de sus remates se estrellaban en el larguero mientras la suerte y el VAR jugaban a su favor al anular un cuarto tanto del Brujas por una falta detectada en el tiempo de descuento.
El encuentro dejó al Barcelona en la undécima posición del grupo, con la urgente necesidad de ajustar su estrategia defensiva si desean mantener vivo su sueño de avanzar a los octavos de final. Nicolo Tresoldi y Carlos Forbs estuvieron a la altura del desafío, complicando la noche para Wojciech Szczesny, quien mostró inseguridades en varias ocasiones críticas. A pesar de los desajustes, el Barça se aferró a su espíritu competitivo en una segunda mitad vibrante. Ahora, con la mirada puesta en el próximo desafío ante el Chelsea en Stamford Bridge, el conjunto blaugrana debe encontrar el equilibrio entre su fragilidad defensiva y su potencial ofensivo liderado por Yamal. El empate en Brujas es una alerta que el Barça no puede ignorar en su camino por la Liga de Campeones.
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