El Papa León XIV enfatizó la necesidad de proteger la dignidad humana en un emotivo discurso durante su homenaje en el Campidoglio, en Roma, donde se detuvo para saludar al alcalde, Roberto Gualtieri, antes de dirigirse a la basílica de San Juan de Letrán para su toma de posesión. El nuevo pontífice subrayó su compromiso con todos los miembros de la diócesis, destacando la importancia de cuidar especialmente a los más vulnerables: «los pequeños, los débiles y los pobres». León XIV, que se proclamó «romano» en su mensaje, expresó su deseo de que Roma se mantenga como un faro de humanidad y civilización, inspirada en los valores del Evangelio.
En respuesta, el alcalde Gualtieri no solo dio la bienvenida al Papa, sino que también ofreció el apoyo de la ciudad en la búsqueda de nuevas relaciones entre naciones y un modelo social más inclusivo. Aseguró que Roma, rica en patrimonio, está lista para colaborar con el Vaticano en la promoción de un paradigma de política renovada que refleje los valores del Jubileo. En un ambiente de esperanza y compromiso mutuo, ambos líderes se mostraron dispuestos a trabajar juntos para avanzar en una visión de un futuro más solidario y humano.
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