El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha calificado de «dramática» la situación económica de la comunidad, señalando niveles alarmantes de pobreza y desigualdad. Tras su reunión con representantes de Cáritas Diocesana de Albacete, Núñez se refirió a un informe de la EAPN que evidencia que 182.000 personas en la región padecen pobreza severa, y que los salarios están un 11% por debajo de la media nacional. Esta situación afecta especialmente a los menores, con un 41% en riesgo de exclusión social.

Núñez responsabilizó al gobierno regional, liderado por el socialista Emiliano García-Page, de implementar políticas que, según él, exacerban la pobreza en lugar de mitigarlas. A pesar de los intentos de García-Page por proyectar una imagen de confrontación con el gobierno central, Núñez sostiene que las decisiones del presidente autonómico perpetúan un entorno de bajos salarios y alta pobreza. En este contexto, el líder del PP clamó por un cambio en la gestión política y económica de la región, resaltando que las soluciones deben venir de su partido y no de la actual administración.

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