La muerte de Juan Antonio Mata, ex secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha y vecino de Albacete, a los 75 años, ha provocado una ola de condolencias en la región. Diversos sectores, incluyendo el gobierno regional, sindicatos y organizaciones empresariales, han expresado su pesar por la partida de un referente en la lucha por los derechos laborales. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, describió la jornada como un «día triste» y subrayó el compromiso de Mata con la mejora de los derechos sociales y laborales. Esta tarde, García-Page tiene previsto visitar el tanatorio de Albacete para ofrecer sus condolencias a la familia y amigos del fallecido.
Además, han reconocido su legado tanto el PSOE como UGT, que destacaron su papel como figura clave en la historia del sindicalismo en la región. La Confederación de Empresarios de Castilla-La Mancha también ha manifestado su tristeza por lo que consideran una «pérdida irreparable» y ha recordado la aportación de Mata al diálogo social en Castilla-La Mancha. El rector de la Universidad de Castilla-La Mancha, Julián Garde, se sumó a estas muestras de respeto, recordando a Mata por su labor en el Consejo Social de la universidad durante muchos años. La muerte de Mata deja una huella profunda en la sociedad castellanomanchega.
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