Pepe Sánchez hizo su debut con el Albacete Balompié en el histórico estadio de Ipurúa, donde su rendimiento ante el Eibar fue notable, lo que le permitió ganarse la confianza del entrenador Alberto. A pesar de un inicio dubitativo, el jugador se sintió cómodo y expresó su satisfacción en la zona mixta, destacando la complejidad del campo y la importancia de sumar puntos. Agradecido por la calidez del grupo, Sánchez reflexionó sobre su adaptación al club, mostrando un optimismo palpable respecto al futuro.
El defensor mencionó que el equipo se encuentra siete puntos por encima de la zona de descenso y enfatizó la estrategia de acumular puntos para alcanzar los 50 que aseguren la permanencia en la categoría. Con una camiseta de debut destinada a su madre como un gesto sentimental, Sánchez se mostró esperanzado y dispuesto a trabajar arduamente para devolver la confianza depositada en él, fijando ya su atención en el próximo encuentro frente al Almería.
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