Tras el reciente Comité Federal del PSOE, Cristina Maestre, portavoz del partido en Castilla-La Mancha, ha manifestado su descontento por lo que califica como una «desconsideración» hacia Emiliano García-Page, actual líder regional. Maestre ha subrayado que García-Page no solo es un dirigente capaz de ganar elecciones contundentemente, sino que también representa el sentir de la calle y las urnas, elemento que considera más significativo que obtener victorias en comités o congresos. La vicesecretaria general ha descrito el encuentro socialista como una «oportunidad perdida» para reflexionar sobre el camino a seguir, sugiriendo que el partido podría estar alejándose de la mayoría social progresista a la que pretende representar.

En sus declaraciones, Maestre ha resaltado la importancia del diálogo y la aceptación de diferentes sensibilidades dentro de un partido democrático, lamentando que estos principios no se hayan reflejado en la reunión. Ha advertido sobre el peligro de suponer que solo los afiliados votan en las elecciones, defendiendo la discrepancia como una forma leal de contribuir al partido. «Qué flaco favor hacen al partido quienes no tienen la valentía de hablar cuando se va en la mala dirección», ha concluido Maestre, insinuando que las decisiones actuales podrían no estar alineadas con las demandas de la sociedad en momentos críticos.

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