El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, restó importancia a las diferencias entre el PSOE y su socio minoritario, Sumar, respecto al aumento del gasto en defensa. Durante una rueda de prensa tras la cumbre de líderes de la Unión Europea en Bruselas, Sánchez calificó la postura de Sumar —que se opone al incremento del gasto militar e incluso propone la salida de España de la OTAN— como una «discrepancia histórica» que ha caracterizado a la izquierda en España durante las últimas cuatro décadas. El presidente defendió que lo primordial es que Sumar respete los compromisos europeos adquiridos por el Gobierno, especialmente en lo que respecta a la inversión en seguridad y defensa, que se espera haya aumentado antes de 2029.
Sánchez subrayó los logros en materia de defensa y gasto social de su Administración, destacando un incremento de 10.000 millones de euros en el gasto en defensa y 120.000 millones en gasto social en los últimos siete años. A pesar de las divergencias, el presidente expresó su agradecimiento a Sumar por respetar el compromiso de España con la seguridad colectiva y reafirmó que su Gobierno continuará con su agenda social sin recortes. Con este mensaje, Sánchez intentó calmar las aguas y marcar una distancia entre las diferencias internas del bloque de izquierda y el compromiso del Gobierno con las exigencias de la Unión Europea.
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