El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha exigido «tiempo y rigor» para investigar las causas del apagón energético que afectó a la Península Ibérica el pasado 28 de abril. En el Congreso, Sánchez destacó que el análisis de la situación implica el estudio de 756 millones de datos en un breve período de veinte minutos. Subrayó la necesidad de no apresurarse a sacar conclusiones ni de cerrar debates de manera prematura, enfatizando que el Gobierno actuará con «transparencia, responsabilidad y rigor técnico».
Sánchez también defendió que el apagón no estuvo relacionado exclusivamente con fuentes de energía renovable o nuclear, criticando a quienes intentan vincular el incidente a intereses ideológicos o empresariales. A pesar de la desconexión temporal de las centrales nucleares, destacó que estas no fueron cruciales para la recuperación del suministro eléctrico, que se logró principalmente gracias a las centrales hidroeléctricas y de ciclo combinado. En un tono optimista, el presidente valoró la respuesta cívica de la ciudadanía durante la crisis, mencionando una notable disminución del crimen y agradeciendo la calma y solidaridad mostrada por los ciudadanos.
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