La Audiencia Provincial de Toledo celebrará el próximo miércoles un juicio contra un matrimonio acusado de frustración a la ejecución y estafa procesal, con una solicitud fiscal de ocho años de prisión para cada uno de ellos. El caso se remonta a un contrato en el que uno de los acusados, administrador de una constructora, se comprometió a edificar una vivienda en Aldeanueva de Barbarroya, pero no cumplió con las especificaciones pactadas. En lugar de entregar la propiedad adecuada, intentó facilitar una que no cumplía con las condiciones acordadas.
El juzgado de primera instancia e instrucción número 2 de Talavera de la Reina ya había ordenado a la empresa constructora que entregara la vivienda conforme al contrato. Sin embargo, el acusado obstruyó este proceso alegando que no era el propietario, sino su esposa, quien también se enfrenta a cargos en este caso. La Fiscalía ha solicitado que cada uno cumpla una pena de tres años por frustrar la ejecución de la sentencia, además de cinco años y diez meses de multa por la estafa procesal. También se propone una multa de tres años a la mercantil, con una cuota diaria de 12 euros.
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