Ante la incertidumbre generada por el suministro eléctrico, el Gobierno regional ha decidido suspender tanto la actividad docente como la sanitaria programada para la mañana del martes. Esta resolución, tomada por el Comité de Cooperación Operativo, ha resultado en el cierre de centros educativos y universidades desde la tarde anterior. Asimismo, se ha establecido la suspensión de consultas médicas, aunque los servicios de urgencias en hospitales y centros de salud permanecerán activos.
El consejero de Sanidad ha justificado estas medidas como una forma de optimizar el uso de generadores eléctricos y evitar la concentración de personas en los centros médicos, garantizando que solo aquellos que necesiten atención crítica se desplacen. Además, se buscará reprogramar todas las citas canceladas, reconociendo la posibilidad de que algunos profesionales sanitarios no puedan llegar a sus lugares de trabajo. La situación ha sido confirmada por el alcalde de la capital regional, quien también ha destacado la necesidad de tomar precauciones en este contexto complicado.
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