El acuerdo entre PSOE y Sumar, que exime a los perceptores del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de tributar, ha sido recibido con satisfacción por UGT Castilla-La Mancha. La secretaria general del sindicato, Lola Alcónez, argumenta que actualmente el SMI no alcanza el 60% del salario medio en España, lo que infringe la Carta Social Europea. Alcónez enfatiza que la tributación podría haber hecho que hasta el 40% del aumento del SMI se perdiera, subrayando que el salario mínimo debería mantenerse sin impuestos, al menos hasta que se alcance un umbral que lo sitúe en 1.393 euros.
Sin embargo, UGT también ha expresado su descontento por la falta de consenso con las organizaciones sindicales en la negociación de este acuerdo. La líder del sindicato critica que el diálogo social no se practique de manera constante y señala que los sindicatos han tenido un papel fundamental en las recientes subidas del SMI. Alcónez concluye que es imperativo establecer tablas del IRPF que sean progresivas y justas, resaltando la necesidad de garantizar el bienestar de los trabajadores en el país.
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