Esta mañana se llevó a cabo la última reunión del Comité de Análisis y Seguimiento Provincial (CASP) en Albacete, donde se abordaron las secuelas de un fallo eléctrico que causó un amplio descontrol. Durante el encuentro, representantes de varias administraciones, como la Delegación del Gobierno, la Junta de Comunidades, y el Ayuntamiento de Albacete, evaluaron la situación y tomaron decisiones difíciles pero necesarias. El delegado Pedro Antonio Ruiz Santos subrayó la importancia de la coordinación entre entidades y la atención a los pacientes, destacando que no fue preciso implementar medidas extraordinarias en las residencias para mayores.
Ruiz Santos también manifestó su inquietud por la situación sanitaria que obligó a liberar camas en hospitales, anticipándose a la necesidad de atender a pacientes que requerían oxígeno en casa. Se prepararon dispositivos para atender a afectados, aunque finalmente no fueron utilizados en su totalidad. El delegado agradeció la colaboración de las empresas de reparto de oxígeno, que facilitaron cerca de 100.000 litros de gasoil para asegurar el funcionamiento de generadores en centros públicos. La normalidad alcanzada se atribuye a la efectiva coordinación entre las diversas administraciones y los cuerpos de seguridad involucrados en la gestión de la crisis.
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