El Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, conmemorado el 30 de marzo, reunió a diversas organizaciones en el Museo de la Cuchillería de Albacete para abordar los desafíos que enfrenta este colectivo. La Plataforma de Apoyo, compuesta por Cruz Roja, Cáritas, Unión Sindical Obrera (USO) y Comisiones Obreras (CCOO), aprovechó la ocasión para que Miguel Martínez, jefe de la Oficina de Extranjería de la Subdelegación del Gobierno, reflexionara sobre la Ley de Extranjería y su impacto en las trabajadoras del hogar migrantes. Martínez destacó la reciente reforma que homogeniza los mecanismos de arraigo, esenciales para la regularización de extranjeros que desean trabajar, aunque advirtió que la tramitación de la nacionalidad no forma parte de sus competencias.
La jornada también reveló que más del 50% de las trabajadoras del hogar son migrantes, con una abrumadora mayoría de mujeres. Ascensión López, de Cáritas, mencionó que, si bien algunas cuentan con contratos y derechos laborales, muchas se encuentran en situaciones irregulares y precarias. Por su parte, Paco Gómez, de CCOO, subrayó que, a pesar de avances como el aumento del salario mínimo interprofesional, la inviolabilidad del domicilio particular dificulta las denuncias ante la Inspección de Trabajo. Actualmente, 2.100 empleados del hogar están dados de alta en la Seguridad Social en Albacete, pero entre el 25 y el 35% de los trabajadores lo hacen sin formalizar su situación, creando un círculo vicioso que perpetúa la precariedad en este sector.
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