Villarrobledo ha sido el escenario de unas fructíferas jornadas dedicadas al entrenamiento y formación de policías locales junto a sus perros detectores pasivos de drogas. En este evento, cerca de un centenar de agentes y alrededor de 80 canes participaron en un intercambio de experiencias y conocimientos que reunió a representantes de distintas comunidades autónomas de España, así como de Colombia. Este encuentro subrayó la importancia de las unidades caninas como herramienta preventiva fundamental en la mejora de la seguridad ciudadana y en la lucha contra el consumo y el pequeño comercio de drogas, especialmente en áreas escolares y espacios públicos donde los menores son más vulnerables.
Durante el evento, el alcalde de Villarrobledo, Valentín Bueno, destacó la profesionalidad, dedicación y entrega de todos los participantes, resaltando la importancia de su labor en la protección de la comunidad. Las jornadas no solo fortalecieron los lazos entre diferentes cuerpos policiales internacionales, sino que también ofrecieron una plataforma para mostrar las habilidades y entrenamientos especializados que convierten a estas unidades en elementos esenciales para mantener la seguridad y el orden en la sociedad.
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