En un pleno cargado de tensión, el Parlamento de Castilla-La Mancha vivió uno de sus momentos más intensos a las 19:00 horas. El motivo fue la intervención de David Moreno, presidente del Grupo Parlamentario Vox, quien acusó al PSOE de actuar como una «banda criminal» y comparó su comportamiento con el de una «mafia». Estas declaraciones provocaron una reacción inmediata del presidente de las Cortes, Pablo Bellido, quien censuró el lenguaje empleado por Moreno, calificándolo de «desmesurado» y exigiendo que retirara sus palabras. Bellido subrayó que ese tipo de afirmaciones nunca se habían permitido en los debates parlamentarios de la región, instando a Moreno a emplear un vocabulario acorde con el prestigio de Castilla-La Mancha.

Moreno se defendió argumentando que su terminología estaba respaldada por informes de la UCO y procesos judiciales contra el PSOE, instando a que se presentara esa documentación para sustentar sus acusaciones. Sin embargo, el presidente de las Cortes advirtió que, sin pruebas, sus palabras no serían reflejadas en el diario de sesiones. Ante este panorama, Emiliano García-Page, líder socialista, optó por una réplica breve que no alcanzó el minuto, señalando que las acusaciones no merecían mayor atención. Su intervención fue recibida con aplausos de su bancada y consejeros. En su turno final, decidió no tomar la palabra, dejando claro su desdén ante las acusaciones vertidas.

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