El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha convocado este martes a su gabinete de seguridad, donde tras cuatro horas de deliberaciones, se ha decidido que si el grupo islamista palestino Hamás no libera a los rehenes antes del sábado 15 de febrero al mediodía, Israel reanudará una ofensiva militar en la Franja de Gaza. Netanyahu declaró en un vídeo que la resolución fue unánime y no especificó si se refería a los tres cautivos previstos para el canje o a los nueve que aún permanecen con vida, aunque fuentes anónimas del gobierno israelí confirmaron que se trata de estos últimos, cuya liberación estaba programada en un período de 42 días del alto el fuego.
La creciente tensión se exacerbó tras el anuncio de Hamás de no cumplir con el acuerdo de liberación, atribuyendo sus razones a supuestas violaciones del gobierno israelí, como el retraso en el regreso de desplazados y continuos ataques en la región. Mientras tanto, el Ejército israelí ha movilizado tropas adicionales en la frontera con Gaza y se ha preparado para diversas eventualidades. En medio de esta escalada, el presidente de EE. UU., Donald Trump, también intervino, advirtiendo sobre graves consecuencias si los rehenes no son liberados a tiempo, lo que ha llevado a Netanyahu a expresar su apoyo a las políticas propuestas por Trump, incluyendo la controvertida idea de transformar la situación en Gaza.
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