El nuevo tramo de la carretera AB-20 en Albacete avanza con pasos firmes hacia su realización, después de que el Consejo Rector de la Gerencia de Urbanismo aprobara el proyecto de urbanización y ordenación vial. Este desarrollo, que abarca aproximadamente 42.000 metros cuadrados, es crucial para el crecimiento urbano y la mejora de la movilidad en la ciudad. Con un presupuesto inicial de casi 6 millones de euros y un plazo de ejecución de 16 meses, el proyecto no recibió alegaciones durante su trámite de información pública, y marca un hito significativo en el compromiso municipal con la sostenibilidad y la modernización de las infraestructuras viales. El edil de Urbanismo, Julián Garijo, destacó la importancia de este proyecto como una base estratégica para futuras construcciones residenciales y mejoras en la calidad de vida urbana.
El nuevo tramo, de 1.350 metros, conectará importantes accesos, como las carreteras de Barrax y Jaén, y el Camino de Pozomajano, mejorando significativamente el flujo vehicular. Con una anchura de 35 metros y equipado con tres glorietas, el vial contará con calzadas de dos carriles en cada sentido, separadas por una mediana, e incluirá paseos para peatones y bicicletas, promoviendo un modelo de ciudad más amigable para el transporte no motorizado. Garijo recordó el origen del proyecto en 2018 y afirmó que esta circunvalación externa es fundamental para el desarrollo ordenado de Albacete. Además, anunció que se está trabajando en el último tramo pendiente para completar la circunvalación alrededor de la ciudad.
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