En un acto reciente en Albacete, el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido, expresó su satisfacción por estar en la ciudad que considera «la ciudad de la alegría», donde recordó momentos personales que marcan su trayectoria política. Durante su intervención, hizo hincapié en la importancia de la Constitución de 1978, que trajo consigo la libertad y la creación de autonomías, al tiempo que criticó a quienes, en algunas comunidades autónomas, cuestionan la utilidad de este modelo. Bellido subrayó que Castilla-La Mancha se erige como un «oasis de estabilidad y normalidad», resaltando la colaboración entre los principales partidos políticos de la región.

Bellido celebró los logros en la aplicación de la ley de dependencia y los esfuerzos por mejorar la sanidad y la educación en la región, anunciando que el próximo curso permitirá la matrícula gratuita para la Universidad. También defendió el nuevo estatuto de autonomía, que se destaca por su lenguaje inclusivo y su reconocimiento a minorías, y que considera beneficioso tanto para la región como para el conjunto del país. Con un llamado a la resiliencia social, Bellido concluyó su discurso recordando la necesidad de nunca rendirse y de tener presente el valor de vivir en comunidad.

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